Violencia vicaria

En el último año se ha tratado de darle mayor relevancia a un nuevo término de violencia que se han inventado las feministas para seguir haciendo de la mujer una víctima y del hombre un agresor, hablamos de la  violencia vicaria, que tiene por objetivo el aplicar sanciones más severas de las que ya existen en contra de los hombres que hayan estado utilizando la violencia, en cualquiera de sus formas, en sus hijos con el objetivo de lastimar a la madre, legislando a favor de la mujer en una completa ceguera de que la violencia tiene sexo o género, y dejando vulnerables a los niños e incluso a los varones Pues continuamos fomentando los estereotipos de género al pensar Y por consiguiente perseguir Y sancionar únicamente por el hecho de que cromosomas tenemos, y para ello les invito a que analicemos los siguientes puntos:

Primero que nada los mayormente perjudicados por este tipo de actos son los menores de edad, son los hijos víctimas de la violencia de sus progenitores o progenitoras, por lo que en todo caso al ser estos Quiénes están siendo sujetos pasivos de la violencia física o psicológica que ejerzan sus padres o madres en contra de ellos para perjudicar al otro progenitor son los primeros afectados y Quienes deberían de estar siendo protegidos por la ley debido a su vulnerabilidad tanto física como mental.

Segundo debemos de considerar que no solo los padres  manipulan a los hijos o violentan a los hijos a fin de vengarse de quienes en su momento fueron sus parejas, sino que también las mujeres, con todo su arsenal de manipulación de emociones en el cual científicamente está probado que somos mejores que los varones, ejercemos violencia para lograr lastimar al padre de nuestros hijos, siendo mucho más fácil para la mujer aplicar este tipo de violencia en virtud de que generalmente es a quien se le otorga la guardia y custodia de los hijos sin siquiera considerar que el padre puede hacer un mejor cuidador de los mismos, y esto debido al prejuicio de que la madre es mejor en el cuidado de los hijos simplemente por ser mujer.

En tercer lugar tenemos que este tipo de conceptos de violencia vicaria se prestan simplemente para seguir desintegrando a la familia en virtud de que entre progenitores, de ambos lados, siempre va a haber inconformidad en las formas de disciplinar o educar los hijos, no debería pero es una realidad, sobre todo tratándose de padres que se encuentran separados, lo que lleva a discusiones absurdas en donde los menores siguen siendo quienes se quedan en medio de dos fuegos por el hecho de no querer reconocer la autoridad de uno o del otro progenitor, ya que existe poca o escasa formación y concientización en la población de las diferencias mentales y hormonales entre hombres y mujeres que llevan enfrentamientos absurdos pensando que con ello se obtiene cierta autoridad y desgraciando con ello a los hijos, haciendo pensar al progenitor que no logra imponerse que la forma de educar o de dirigir a los hijos por parte de él otro es un Atentado en contra de su persona, por lo que damos herramientas para seguir victimizando a una de las partes en este caso a la mujer, sin ir directamente al fondo Qué es la educación y formación de padres mentalmente saludables que puedan verdaderamente sobrellevar la separaciones de pareja entendiendo que lo más importante son y seguirán siendo los hijos y no sus cuotas personales de poder y venganza.

En cuarto lugar,  es importante resaltar que nuestro código civil y nuestro código penal ya contemplan este tipo de situaciones dentro del concepto de violencia familiar, y la violencia familiar puede ser ejercida por cualquiera de los integrantes de la familia sin discriminar por razón de sexo o de género a ninguno de sus integrantes, permitiendo con ello que verdaderamente se aplique una sanción a quién resulta responsable de los actos con el objetivo de lastimar o menoscabar la integridad física, mental o de cualquier otra índole sobre uno de los integrantes de la familia, siendo innecesario establecer un tipo de violencia exclusivamente que proteja a la mujer Pues lo único que se genera con ello Es más desigualdad social y muchísimos más conflictos familiares Que continúan destrozando nuestra sociedad.

En quinto lugar y por último,  ya es tiempo de que nos quitemos los prejuicios de que el hombre es violento por naturaleza y nos empeñamos en destruir la masculinidad tan necesarias para el desarrollo integral de nuestra sociedad, que aunque quieran negarlo los grupos feministtoides está acreditado que la falta de hombres que ejerzan su hombría da sentido de pertenencia a los hijos, genera identidad en los nuevos seres humanos que integran la sociedad y en consecuencia se produce una sociedad más fuerte y sólida, lo que debemos de empezar verdaderamente a combatir la violencia como lo que es, y no por quién creemos que únicamente la ejerce, viendo la violencia como una plaga que puede ser representada en hombres y en mujeres por igual en padres o en madres por igual buscando perjudicar y lastimar consciente o inconscientemente a los seres humanos que se encuentran a su rededor;  hasta que entendamos que tan violento puede ser un hombre como una mujer, y legislemos con la perspectiva de proteger en primer lugar a los más vulnerables que siempre serán los hijos sobre todo los menores de edad, comenzaremos a avanzar en esta batalla en contra de la violencia familiar, atendiendo de manera integral a la familia y buscando el interés Superior de la infancia qué es la máxima que debe de regir en cualquier asunto que involucre a niños, niñas y adolescentes. 

Legisladores, ustedes gobiernan para todos, no nada más para favorecer a la mujer, legislar a favor únicamente de un sexo o género es abrir una brecha más grande todavía de injusticia social que como consecuencia genera un sentimiento de enojo y frustración que lleva en muchos casos a la venganza social y con ello lo único que provocan es convertirse como legisladores, en generadores de más y más violencia para nuestro país.

Si van a legislar en cuanto a violencia se refiere entiendan que la violencia es ejercida por cualquier persona no solo por un sexo.

Vamos México, eres el águila que devora serpientes. 

Lic. Ruth Sánchez Hernández