El aspirante al Senado por el Frente Amplio por México, Williams Oswaldo Ochoa Gallegos, denunció que un comando interceptó a su equipo de campaña con armas largas sobre la carretera Tuxtla Gutiérrez- Arriaga, cuando se dirigían hacia la zona fronteriza con Guatemala, al municipio de Suchiate, donde este lunes sostendrán un evento con militancia y simpatizantes.
“Hace unos minutos, con armas largas y violencia, justo 500 metros antes de la caseta de cobro de Arriaga, un comando armado en una Jeep color gris interceptó a mi equipo de trabajo y lo despojó de uno de los vehículos en los que se transportaba con propaganda”, señaló Ochoa Gallegos.
El político chiapaneco apuntó que no se puede permitir que la violencia siga como si nada: “No nos callaremos ante la situación que vivimos en Chiapas, gracias a Dios, mi equipo se encuentra con vida”.
A través de su cuenta de X, Ochoa puntualizó que no doblarán las manos ante la ola de inseguridad que se vive en el estado; también pidió extremar precauciones cuando la ciudadanía salga a carretera.
Latinus conversó con el equipo de campaña de Willy Ochoa, que explicó fueron tres personas, dos hombres y una mujer, que fueron interceptados por al menos seis sujetos armados.
Además del vehículo, los afectados relataron que los desconocidos robaron propaganda que se utilizaría para los eventos en Suchiate, Motozintla, Tapachula, Acacoyagua y Unión Juárez. También los despojaron de sus teléfonos celulares.
Este es el segundo altercado en contra del equipo de campaña y del propio Willy Ochoa que se denuncia. El pasado 23 de febrero, Ochoa Gallegos informó que luego de acudir a un evento en el municipio de Las Rosas, sujetos a bordo de motocicletas y vehículos intentaron secuestrarlo.
El candidato al Senado explicó que días antes había recibido amenazas para que no se presentara al mitin; pese a esto acudió y fue víctima de persecución por hombres armados.
Desde inicios de marzo, a Williams Ochoa se le ha visto acudir a sus eventos acompañado de un fuerte dispositivo de seguridad integrado por guardaespaldas privados y policías estatales.
Con información de Latinus