El presidente más humanista de la historia, el de los abrazos y el amor, en menos de seis años se ha peleado ya con los gobiernos de España, Argentina, Ecuador, Bolivia, Perú, Panamá, Austria, Estados Unidos, y ahora Ecuador, con Republicanos, Demócratas, ucranianos, medios de comunicación nacionales e internacionales como el NYT, el Financial Times, El País, el Washington Post, con el Rey de España, la OCDE, el Banco Mundial, con la OEA, con los vapeadores, los videojuegos, con la Suprema Corte y los jueces, con todos los órganos autónomos, los consejeros electorales, los médicos y padres de niños con cáncer, farmacéuticas, laboratorios, aerolíneas, cientos de periodistas y ciudadanos que han osado a criticarlo, con empresarios, con YouTube, Facebook, Twitter, el subcomandante Marcos, un montón de exgobernadores y todos los expresidentes, se ha peleado con todas las organizaciones de la sociedad civil y activistas de cualquier tema, con las calificadoras, las feministas, los deportistas, los becarios, los ambientalistas, el FMI, la comunidad científica, los expertos, con TODOS.
Menos con los malos. Con esos no se pelea… los abraza. Los dictadores, los corruptos, los narcotraficantes. Para ellos, amor y paz. Ya basta, llegó la hora de pasar de página y terminar con esta vergüenza para todo México y la región.
Agustín Antonetti, activista argentino