El español Rafael Nadal no pudo firmar su enésima resurrección en la pista central de Roland Garros, donde cayó ante un sólido Alexander Zverev en la primera ronda, en un duelo que tuvo aires de despedida, pese a que el 14 veces ganador no ha descartado regresar el año próximo.
El resultado, 6-3, 7-6 y 6-3, fue tan contundente como el partido, que tuvo un único dominador, salvo un intento de rebelión del español en las postrimerías del segundo set y en el inicio del tercero, que acalló el germano elevando el nivel para no dar esperanzas a su rival y a la grada que lo aclamaba.
Nadal era el favorito sentimental de la gran mayoría de los aficionados; sin embargo, desde hace varios meses arrastra lesiones que le han impedido competir de forma permanente y por ende retomar un óptimo nivel.
Fue la primera vez en su larga e ilustre carrera que Nadal pierde dos partidos consecutivos en canchas de arcilla y la primera vez en la que cae en un duelo previo a la cuarta ronda del Abierto de Francia. La foja del astro español en el Slam en polvo de ladrillo quedó en 112-4.
El partido se jugó bajo techo en la pista Court Philippe Chatrier, y los vítores a favor de Nadal por parte de los 15,000 espectadores retumbaron.
Con información de Latinus