El periodismo ante los hechos

El periodismo es la disciplina y también la profesión que difunde información a través de los medios masivos de comunicación. El periodismo implica la obtención, tratamiento, interpretación, redacción y difusión de informaciones consideradas relevantes, importantes o pertinentes para una audiencia. Su propósito central es brindar información, o sea, hacer llegar a los ciudadanos un relato de los hechos, confiable, veraz y oportuno.     

La independencia del periodismo de los poderes fácticos de una sociedad (el Estado, los partidos políticos, las clases económicas, las iglesias, etc.) es a menudo considerado como una garantía de la salud de una democracia, porque puede informar a la población de los asuntos que no convengan a los poderosos. Por eso se le llama el “cuarto poder” (político).

Ante las circunstancias que presenta la elección del 2 de junio, existen dos preguntas que es interesante tratar de responder con objetividad: 1) ¿el periodismo en México y Chihuahua, es independiente de los poderes fácticos? 2) ¿la información que se hace llegar a los ciudadanos es un relato de los hechos, veraz y confiable? Dejo la respuesta a mis amables lectores y amigos, mismas que desde luego son válidas y respetables; por mi parte, más que responder escribiré unas breves reflexiones sobre estas preguntas.

El surgimiento y desarrollo exponencial de las tecnologías de la computación e información, de la Inteligencia Artificial (IA), la comunicación en redes sociales y el avance en la cultura democrática de los mexicanos, impidieron que los poderes facticos  limitaran la información que se hace llegar a los ciudadanos. Los medios, periodistas y columnistas, salvo muy contadas excepciones no lograron sustraerse de sus paradigmas, ideológicas, filias y fobias o lo que es peor, su labor periodística la convirtieron en herramienta de promoción de partidos y/o candidatos de los grupos de interés a los que tradicionalmente se han rentado, dejando de lado la esencia del periodismo. Fue así como descalificaron encuestas que no favorecían a sus candidatos o difundían profusamente las que los favorecían por inverosímiles que fueran, hicieron eco o realizaron todo tipo de “análisis” y predicciones tratando de cambiar la realidad o de plano ocultarla. Los electores todos los días enviaba señales nítidas, a través de las redes sociales, indicando que la elección presidencial y el senado en Chihuahua, lo ganaría morena, sin embargo, no informaban de los hechos con veracidad y oportunidad, su labor les hizo perder confiabilidad a ellos y a sus medios, hoy muchos enfrentan desprestigio.

Espero que los periodistas, donde además tengo buenos amigos, reflexionen en la importancia que el periodismo tiene para el desarrollo integral de la persona humana  y desde luego para avanzar en la cultura democrática de nuestra sociedad y sean punta de lanza en el desarrollo de un periodismo más ético y profesional; me atrevo a afirmar que, el periodismo es después de los padres en el hogar y los maestros en la escuela de nivel básico, son los formadores de la sociedad, si ellos fallan en su labor de formadores, la sociedad tiene grandes probabilidades de fallar.

Hoy el periodismo enfrenta no solo el reto de la competencia que significa la comunicación que a gran velocidad se difunde en las redes sociales, tiene ante si el reto de difundir los hechos que interesan o afectan a la sociedad, con oportunidad, veracidad y credibilidad y tratarlos e interpretarlos en sus editoriales, artículos y columnas con ética y responsabilidad, para que tenga utilidad para su público lector, al ser tomada como herramienta de información que oriente su actuar en la sociedad.

Ricardo Rodríguez Lugo

7 de Junio 2024