Tras encender la tradicional antorcha de los Juegos Olímpicos París 2024 el pasado 16 de abril, en Francia se inició una oleada de desalojos de inmigrantes y personas sin hogar en los alrededores de la capital, a quienes se les obligar a subir en autobuses para trasladarlos a otras regiones del país, reportó el domingo France24.
Las acciones de los agentes y funcionarios se aceleraron tras las medidas tomadas por el Ministerio del Interior y el Ministerio de la Vivienda de Francia hace aproximadamente un año, cuyo documento detalla las "directrices para la gestión administrativa y reubicación de personas alojadas en centros de acogida temporal".
Según las instrucciones, casi todas las regiones francesas deben acoger a quienes sean expulsados de la región Isla de Francia, alrededor de la capital, durante tres semanas. Varias organizaciones de derechos humanos han tachado la situación de "limpieza social".
Pérdida de trabajo a causa del desalojo
El medio expone el caso de 'Omar', un joven inmigrante sudanés de 27 años, quien cuenta con un permiso de residencia por 10 años, valido hasta 2028, y un tenía un empleo temporal. Sin embargo, por mucho tiempo ha vivido en una situación precaria en una casa ocupada de forma irregular junto con otros inmigrantes chadianos, eritreos, etíopes y marfileños.
La mañana del 17 de abril, el joven fue desalojado del inmueble ubicado en el suburbio parisino de Saint-Denis. Estaba precisamente en su trabajo cuando recibió la llamada en la que le ofrecían realojarlo en otro sitio.
"Le dije a mi jefe que mañana podría tener un lugar donde quedarme", relató 'Omar'. "Una vez que regresé a la casa ocupada, había mucha gente y también la Policía".
No obstante, cuando subió a un autobús, este lo llevó a un centro de acogida temporal en las afueras de la ciudad de Orleans, a 130 kilómetros de distancia. Allí estuvo durante tres semanas en un hotel deteriorado en una zona comercial, donde permaneció en su habitación casi todo el tiempo.
"A veces salía hacia el centro de la ciudad para sentirme un poco vivo, pero me sentía prisionero en ese lugar", dijo 'Omar' a France 24.
Al finalizar el plazo de refugio temporal, le dijeron que tenía que abandonarlo, sin que se le ofreciera otra alternativa. " Al final perdí mi lugar en la casa ocupada, perdí mi trabajo en la obra y ahora no tengo solución de vivienda", expresó.
Crecen las reubicaciones y el número de personas en la calle
"Esta aceleración del ritmo de los desalojos y de la oferta de viviendas temporales coincide con la llegada de los Juegos Olímpicos", afirmó el activista de la ONG Collectif accès au droit, Théo Férignac. "Y aunque las autoridades públicas no lo admitan oficialmente, estas cifras muestran claramente el deseo de tener el menor número posible de campamentos para personas sin hogar en París este verano", añadió.
Varios grupos de activistas recabaron los resultados de sus investigaciones de campo realizadas entre abril de 2023 y mayo de 2024 en un informe publicado el pasado 5 de junio, donde recopilaron varios indicios de que los Juegos Olímpicos y Paralímpicos "están acelerando la dispersión y el traslado de personas en situaciones vulnerables".
Desde la Alcaldía de París estiman que "cada vez hay más gente en las calles" e informaron que las casi 3.500 personas sin techo registradas este año en la capital francesa representan un aumento del 16 % respecto al 2023.
Con información de actualidad.rt.com