Empresas, en la mira del cibercrimen

En el contexto mundial, la dependencia del internet para diversas actividades, desde la economía hasta la seguridad, es innegable. Sin embargo, esta dependencia conlleva riesgos significativos, como los ciberataques, que han aumentado considerablemente en los últimos años. Según Forbes México, Latinoamérica enfrenta más de 1,600 ciberataques por segundo, siendo México el segundo país más afectado después de Brasil, según el reporte LATAM CISCO 2023.

El inicio de la pandemia de Covid-19 impulsó una acelerada transformación digital, aumentando la vulnerabilidad ante ciberataques. “Mucha de la digitalización en la mercadotecnia y las empresas tuvo que acelerar su transición hacia la nube para adaptarse al cambio y mantener la continuidad del negocio”, explica Enrique Herrera, especialista en Infosecurity México. En 2023, México registró un total de 94,000 millones de intentos de ciberataques, según el laboratorio de análisis e inteligencia de amenazas de Fortinet, destacando la urgencia de reforzar las medidas de ciberseguridad.

RETOS DE CULTURA E INVERSIÓN

Las empresas son especialmente vulnerables debido a la migración de información a sistemas en la nube, donde los cibercriminales las atacan a través del robo de credenciales. Pese a esto, muchas organizaciones carecen de una cultura sólida de prevención e inversión en ciberseguridad. “En México y en algunos países de Latinoamérica, las empresas no invierten en ciberseguridad”, señala Herrera. “Cuando uno plantea esta necesidad, los empresarios responden que no tendrán rendimiento. Desafortunadamente, la ciberseguridad no ofrece un ingreso mayor, pero sí ayuda a protegerse y estar salvaguardado ante amenazas cibernéticas”.

Combatir las amenazas cibernéticas requiere una colaboración entre individuos, empresas, gobiernos y organizaciones internacionales. Los especialistas coinciden en que la concientización sobre la ciberseguridad es fundamental. En México, se deben implementar campañas de educación para sensibilizar a los usuarios sobre las amenazas cibernéticas y enseñarles las mejores prácticas de seguridad, como el uso de contraseñas fuertes, la identificación de correos electrónicos de phishing y la actualización regular del software.

La encuesta Digital Trust Insights 2024, realizada a 3,876 ejecutivos de negocios y tecnología de las empresas más grandes del mundo, reveló que el 30% de los encuestados con ingresos de 10 mil millones de dólares o más muestran un margen considerable para mejorar la ciberseguridad. Los resultados también indicaron que cinco de cada diez empresas mexicanas tuvieron pérdidas de hasta 999 mil dólares debido a exfiltraciones de datos en los últimos tres años, mientras que el 26% reportó daños económicos de un millón a más de 20 millones de dólares en el mismo periodo.

La ciberseguridad enfrenta desafíos adicionales con la introducción de la Inteligencia Artificial. El 64% de los CEO cree que la  IA generativa podría ser utilizada por cibercriminales para crear ataques más sofisticados y difíciles de detectar. Juan Cisneros López, presidente y fundador del CISO Club MX, advierte sobre el aumento de los ciberataques debido a la tecnología emergente. “Los sistemas de IA pueden ser susceptibles a ataques diseñados para engañarlos y manipularlos”, señala.

NECESIDAD DE UNA CULTURA DE CIBERSEGURIDAD

Es crucial adoptar enfoques éticos y responsables en el desarrollo, implementación y regulación de la IA en el contexto de la  ciberseguridad. La falta de una cultura de ciberseguridad es una debilidad significativa, según Cisneros López. “Es como la gastronomía mexicana, tomó muchos años para que se llevara a cabo. Pasa lo mismo con la cultura de ciberseguridad. Si no somos partícipes de esa cultura, va a tomar años en que la gente lo aprenda y, por lo tanto, seguirán las vulneraciones a las empresas”.

La ciberseguridad es un desafío continuo que requiere inversión y colaboración. Las organizaciones deben estar conscientes de los riesgos y tomar medidas proactivas para protegerse. Aunque la ciberseguridad no genera ingresos directos, es esencial para la estabilidad y crecimiento a largo plazo de cualquier empresa.

Tomado de massinformación.com.mx

Con información de Forbes México