Hace unos días, murió Samuel Kalisch.
A diferencia de otras muchas ocasiones, esta vez no fue necesario modificar la columna. No la había escrito.
Las circunstancias de su fallecimiento salen sobrando; no es su muerte lo más significativo, lo fue su vida.
Don Samuel Kalisch Valdez nació el 23 de mayo de 1942 en la ciudad de Chihuahua; en 1963 se graduó como Ingeniero Agrónomo Zootecnista en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM). Polifacético, en el transcurso de su vida profesional, política, social y empresarial, don Samuel ocupó varios roles significativos: empezando porque, en 1968, asumió la presidencia de Kalisch Fierro y Acero y de Kalisch Chatarra; así, de 1970 a 1972, fue director y profesor en la Facultad de Zootecnia de la Universidad Autónoma de Chihuahua; fue Presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chihuahua (CANACO) entre 1976 y 1977; Regidor de Tesorería del Cabildo del Municipio de Chihuahua de 1983 a 1985, desde 1989 empezó a fungir como Consejero del ITESM, Campus Chihuahua; fue presidente del Centro Empresarial de Chihuahua-Coparmex (1990-1992); presidente de Desarrollo Económico de Chihuahua, A.C. (1992-1995); fue promotor y Secretario Técnico del Fideicomiso Fondo para Reconstrucción de Zonas Dañadas de la Ciudad de Chihuahua (1990-1994); fue Secretario Técnico Estatal del Fideicomiso Fondo Social del Empresariado Chihuahuense, antecedente que da vida a la Fundación del Empresariado Chihuahuenses (FECHAC).
Como empresario, fue propietario y director de tres empresas en los rubros comercial, industrial y de transporte, todas ellas dedicadas al ramo de acero y reciclaje de metales; fue presidente del Consejo de Administración del Parque Nacional Cumbres de Majalca y fue el presidente de la FECHAC de 1995 a mayo de 2002.
En 1997, el Centro Mexicano para la Filantropía (CEMEFI) le otorgó el Reconocimiento al Compromiso con los Demás, por haber diseñado y promovido la creación de la FECHAC, institución que permitió “la participación voluntaria y constante de 26 mil empresarios del Estado de Chihuahua con aportaciones para el desarrollo social”; es precisamente bajo su dirección, que la institución ganó el Premio Eugenio Garza Sada en 1999.
Aquí me detengo; esa breve semblanza demuestra que don Samuel fue un empresario exitoso desde hace décadas, 56 años, ni más ni menos. En esas condiciones, muchas personas se habrían dedicado a sus asuntos, a crecer y prosperar en lo material sin mayor problema; don Samuel no; como lo prueba esa breve semblanza, inmerso en el mundo empresarial, se distinguió también como filántropo; y no sólo en la filantropía dio muestras de un espíritu generoso y decidido; en un año tan lejano como 1983 (hace 39 años) fue Regidor de oposición en el Cabildo que encabezó ese otro gran hombre, don Luis H. Álvarez.
Volviendo a don Samuel, decíamos que fue Regidor de oposición, ¡Sí! ¡De oposición! Un hombre de quien se podría afirmar que tenía la vida resuelta (desde el punto de vista económico) y que podía justificar su inacción política en atención a su compromiso social y filantrópico, se metió en política; y se metió en política no como muchos, del lado de un gobierno obtuso, cerrado, corrupto y voraz —que eso era el PRI desde sus orígenes—, no, incursionó en la vida pública, y contra todo pronóstico y corriendo riesgos enormes, del lado de la sociedad, de la apertura y de la democracia, del lado del PAN. Eso habla de la entereza moral de don Samuel y de su valentía innegables. Eso hace a un gran hombre: afrontar los retos que su tiempo le impone sin arredrarse y haciendo lo que debe hacer en cada caso sin temor a las consecuencias.
Yo no fui un íntimo de don Samuel; apenas sí coincidimos en algunos momentos de nuestras vidas; sin embargo, las pocas veces que sostuvimos un diálogo éste fue de índole cordial y en muy buenos términos. De ese hecho, da cuenta que don Samuel me leía… y no siempre para festejar mis gracias, peros generalmente sí. Pongo un ejemplo, el 3 de noviembre de 2020 escribí una columna que titulé: “DE TUBÉRCULOS Y TABERNÁCULOS” y que finalicé con las siguientes líneas: “[…] es decir, desde el día 20, en promedio, hubo 6 mil 521 contagios diarios, lo que significa un incremento ¡del 75%! respecto de la cifra de cinco días antes.[1] De hecho, el propio día 20, el de las declaraciones confusas, discordantes y cantinflescas entre el Prejidente y su sub, inaugura la racha mortal pues, de manera ininterrumpida, el crecimiento supera los seis mil casos diarios.
Si eso no es rebrote, un tubérculo es un youtuber tímido.
Como sea, entre tanta chacota y mentira, la danza de los números de muertos por COVID se volvió un asunto de cantina o, mejor dicho, de tabernáculo, donde el Peje pontifica y la audiencia rendida se hinca para… adorarlo”.
Parcas, pero importantes para mí —entre otras razones porque me llama “amigo”—, me quedo con sus palabras: “Y apareció el amigo Villegas. Gracias y buenos comentarios Saludos”.
Sirvan estos párrafos para celebrar la vida plena, completa, íntegra de don Samuel Kalish Valdez.
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Luis Villegas Montes
luvimo6608@gmail.com luvimo6614@hotmail.com
[1] [En línea] visible en el sitio: https://en.wikipedia.org/wiki/COVID-19_pandemic_deaths#Situation_on_23_October_2020 Consultado el 2 de noviembre de 2020 a las 21.00 hrs.