CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El “Burj Azizi” será el segundo rascacielos más alto del mundo, sólo detrás del Burj Khalifa. Su construcción comenzó en enero de este año en Dubái, en los Emiratos Árabes Unidos (EAU), y se espera que se finalice en 2028.
La desarrolladora Azizi Developments no había dado a conocer la altura del edificio, ya que estaba esperando la autorización de la Autoridad General de Aviación Civil, pero el 4 de septiembre, finalmente, se informó que el rascacielos tendrá una altura de 725 metros.
El nuevo rascacielos se incorporará al panorama dubaití a 103m por debajo del Burj Khalifa. Además, el Azizi estará 46m por encima del Merdeka 118, el segundo más alto del mundo actualmente, ubicado en Kuala Lumpur, Malasia.
De acuerdo con el render del proyecto, el Burj Azizi será un edificio delgado, con un exterior de cristal con varios retranqueos en la carretera Sheikh Zayed, que corre paralela a la costa del Golfo Pérsico.
Según la desarrolladora, el edificio “contará con lujosos y elegantes apartamentos y áticos, un hotel de 7 estrellas, un centro comercial vertical distribuido en varias plantas, excepcionales puntos de venta de alimentos y bebidas, lujosos restaurantes de alta cocina y una plataforma de observación para contemplar las impresionantes vistas de Dubái”.
Pero no todo es glamur en el desarrollo urbano en los países miembros del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo. Alrededor de 10 mil trabajadores migrantes del este asiático mueren cada año en esa región, de acuerdo con un reporte de 2022, realizado por ONGs de Bangladesh, Pakistán, India, Filipinas, Nepal y FairSquare Projects, del Reino Unido.
Las ONG refirieron en el informe, “Signos vitales: las muertes de los migrantes en el Golfo”, que según una investigación de Human Rights Watch de 2014, sobre la construcción de la isla Saadiyat en los EAU, los empleados de la construcción trabajaban seis días y medio a la semana y permanecían en el lugar 76.5 horas a la semana.
El reporte señaló que los trabajadores migrantes mal pagados del Golfo están expuestos a riesgos a su salud y vida, como: calor, que puede provocar estrés térmico que daña los órganos; humedad; contaminación del aire; exceso de trabajo; condiciones de trabajo abusivas; malas prácticas de salud y seguridad en el trabajo; largas jornadas laborales; estrés psicosocial e hipertensión.
Con información de proceso.com.mx