Comunicado:
Estimamos contradictorio que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, haya emitido una sentencia que permita la eliminación de seres humanos en su etapa más vulnerable, es decir, de aquellos que se encuentran en el vientre de sus madres, sin una causal médica que justifique dicho procedimiento, y autorizando el acto más violento en contra de las niñas y niños de nuestro Estado, que es el asesinarlos sin derecho a voz y defensa.
El derecho a la vida, es el derecho que todo ser humano tiene a su desarrollo psicobiológico desde la concepción hasta su muerte natural y que sirve como presupuesto elemental para la existencia de cualquier derecho, es inherente al ser humano, esto es, que le corresponde por el simple hecho de ser humano. Una mujer embarazada lleva a un ser humano, no hay otra opción.
Nuestro país enfrenta una pérdida de valores histórica, que se ha visto reflejada en la toma de decisiones gubernamentales, políticas, legislativas e incluso judiciales, como es el caso de la SCJN, la cual, paradójicamente en vez de PROTEGER el primer y fundamental derecho humano, que es la VIDA, esta fomentando el derramamiento de sangre inocente en nuestro Estado; y no solamente estima en poco su protección, sino que pretende imponerla a una sociedad predominantemente provida y profamilia, pues la sociedad Chihuahuense, en más de una ocasión se ha manifestado públicamente en contra del aborto, y nuestra propia Constitución Local es el reflejo del sentir del pueblo de Chihuahua que establece en su Artículo 5° que “todo ser humano tiene derecho a la protección jurídica de su vida, desde el momento mismo de la concepción.” La Suprema Corte esta violentando no solo la autonomía del Estado, sino también esta anulando la voluntad del Pueblo Chihuahuense que se conforma por gente valiente, que defienden inocentes en el vientre.
Por ello, solicitamos a nuestros legisladores del Congreso del Estado, que legislen en un sentido de protección y prevención más amplio para resguardar a las mujeres que caen en el engaño del aborto, y al gobierno del Estado de Chihuahua, que genere campañas de prevención y abstención en los niños, niñas y adolescentes de todo nuestro territorio federal, para que el aborto nisiquiera sea una opción considerada por nuestras mujeres en Chihuahua, pues los chihuahuenses protegemos las vidas inocentes conforme a nuestras convicciones y a los Tratados Internaciones de los cuales México es parte, y que la SCJN ha decidido ignorar deliberadamente como el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos que establece en su artículo 6° fracción 1. “Que el Derecho a la vida es inherente a la persona humana. Este derecho estará protegido por la ley. Nadie podrá ser privado de la vida arbitrariamente”, o la Convención Americana de Derechos Humanos que en su artículo 4° se refiere textual al “Derecho a la Vida” determinando que “toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley y, en general, a partir del momento de la concepción. Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente”.
Señora Gobernadora María Eugenia Campos Galván, usted portó orgullosa el pañuelo azul en su campaña, nos mostró ser una mujer de vida y no de muerte, reflejando el sentir de sus gobernados, le pedimos que nos ayude a detener el derramamiento de sangre con prevención y capacitación en todo el territorio de Chihuahua, que las mujeres en nuestro Estado no necesiten pensar en el aborto como una opción y que nuestra tierra reciba semillas de vida para seguir siendo el Estado GRANDE.
En virtud de lo anterior, reprobamos que se imponga en el Estado de Chihuahua la tortura de seres humanos por nacer, de manera arbitraria y sin derecho a una defensa adecuada para salvaguardar su vida, nos avergonzamos de un Tribunal de Justicia que elige matar inocentes, pero hemos entendido que nuestra Suprema Corte de Justicia se ha convertido en un instrumento de la cultura progresista de muerte, que con supuestos justificantes legales ajenos a toda ciencia y verdad biológica, que han destruido tantas vidas, se ha encargado de cosechar los frutos de sus decisiones y ahora le vemos agonizar con la reforma judicial.
En Chihuahua no defendemos la vida porque está en la Constitución. Está en la Constitución porque defendemos la vida.
Chihuahuenses al grito de ¡VIDA!