Norma Piña Hernández, ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), participó este lunes en un evento de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en el que aseguró que uno de los propósitos del Poder Judicial es proteger los derechos humanos y ser un contrapeso al poder, en referencia a la reforma judicial que aprobaron Morena y sus aliados.
"Hay evidencia que proporciona la historia y el presente en muchas latitudes de que los derechos humanos están en riesgo cuando el poder no puede ser contenido, frenado ni controlado", dijo.
La ministra presidenta también señaló que la democracia constitucional atraviesa "momentos muy delicados y difíciles" actualmente. También citó palabras de la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y jueces de distrito del Poder Judicial de la Federación (PJF) quienes afirman que con la reforma judicial se socava la confianza en el país, se va a politizar la impartición de justicia, va a desaparecer la carrera judicial y se va a erosionar la certeza jurídica.
Piña Hernández declaró que existe todavía la necesidad de hacer un análisis profundo de la reforma, pues hay un "abanico de voces" que cuestionan las implicaciones y repercusiones de la reforma judicial, y en una democracia se escucha a todos y "no se desoye a nadie".
"Cuando múltiples voces se lanzan en un coro de advertencia, es prudente poner atención", comentó.
Homenaje a la Constitución de 1824
La ministra presidenta participó en la inauguración del XVI Congreso Iberoamericano de Derecho Constitucional en el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, en el que se hizo un homenaje a la Constitución de 1824.
La ministra recordó que desde esa Constitución, que cumple su bicentenario, se dividió el supremo poder en los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial, y se optó por una forma de gobierno federalista. Sin embargo, también destacó que en 1835 se realizó una nueva ley fundamental que cambió la forma de gobierno por el centralismo.
"Esto nos deja claro, nos permite aprender y recordar una severa lección histórica: el constitucionalismo está sujeto a fuertes golpes de timón", sentenció.
Diego Valadés, jurista investigador del IIJ, también participó en el evento y afirmó que existe un riesgo real de que haya ingobernabilidad a causa del "posconstitucionalismo", en el que los poderes están bajo "una voz personal erigida como voz de la voluntad colectiva".
"El posconstitucionalismo sigue la ruta trazada por la posdemocracia y la posverdad: acude a instrumentos democráticos para legitimar un poder concentrado y discrecional. La ingobernabilidad es un riesgo real que se aproxima", señaló.
Con información de Latinus