Yasmín Esquivel Mossa, ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), defendió al máximo tribunal cuando fue candidata a integrarse a él, pues afirmó que era la institución emblema de la división de poderes y la consideró como el dique que contiene los “excesos” del Ejecutivo y el Legislativo.
“En mi opinión, la Suprema Corte debe buscar a través de la justicia el bienestar general de los mexicanos, ser un dique que contenga cualquier exceso de cualquiera de los poderes. Es por excelencia la institución emblemática de la división de los poderes del Estado mexicano”, dijo la hoy ministra ante el Senado en 2019.
Esquivel Mossa expresó lo anterior durante su comparecencia ante el pleno de la Cámara Alta cuando fue nominada hace cinco años por el expresidente Andrés Manuel López Obrador para formar parte de la Suprema Corte en sustitución de la ministra en retiro Margarita Luna Ramos.
Esa opinión cambió y la hoy ministra ha criticado que la Corte analice la constitucionalidad de diferentes decisiones tomadas por el Congreso y la Presidencia, entre ellas el plan B electoral, el traspaso de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional y el acuerdo que blindó la información de los megaproyectos de López Obrador.
El pasado 3 de octubre, mientras se discutía aceptar consultas contra la reforma judicial, Esquivel Mossa volvió a defender las actuaciones del Poder Legislativo, al considerar que “sería antidemocrático” que la Suprema Corte revisara las actuaciones del Congreso cuando aprueba reformas a la Constitución.
“Someter al órgano autor de las reformas a la Constitución al control de calidad de la SCJN sería abiertamente antidemocrático, atentatorio al principio de división de poderes”, dijo en esa sesión del pleno.
Sin embargo, en 2019, durante su comparecencia en el Senado, Esquivel calificó a la Corte como “el máximo intérprete de la Constitución”. Hoy cuestiona las decisiones de sus pares e, incluso, advierte posibles “golpes de Estado” cometidos por el tribunal constitucional.
Los ministros de la SCJN acordaron que este martes 5 de noviembre comience la discusión del proyecto de sentencia del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, en el que se propone declarar como inconstitucionales ciertas partes de la reforma judicial impulsada por el expresidente López Obrador y aprobada por la mayoría de Morena en el Congreso.
Hace un mes, Esquivel adelantó que bajo su criterio, la reforma judicial ya era definitiva e inatacable y que los ministros no podían “detenerse” a revisar las peticiones de jueces y magistrados que consideran a esa modificación constitucional como violatoria de la división de poderes, contradiciendo su discurso de 2019.
“Me comprometo a defender la autonomía e independencia judicial, presupuesto indispensable de un Estado constitucional de derecho. Independencia sin simpatías ideológicas, respondiendo a los mandatos de nuestra Constitución política”, expresó hace cinco años en el Senado.
Con información de Latinus