EFE.- El supuesto autor del tiroteo ocurrido este martes en un centro educativo para adultos en Örebro (200 kilómetros al oeste de Estocolmo), en el que hay 11 muertos y seis heridos, ya había fallecido cuando la policía lo encontró en la escuela, informaron este miércoles las autoridades suecas.
"Al llegar la policía al lugar, se escucharon disparos. Cuando se encontró al sospechoso, esa persona ya estaba muerta. No podemos confirmar que el tirador se haya disparado, pero todo apunta a que sí", dijo en rueda de prensa el jefe de la policía de Örebro, Roberto Eid Forest.
Forest señaló que la investigación sigue abierta, que no está claro el desarrollo de los hechos y que todavía no se ha terminado con la identificación de los cadáveres.
La Policía sueca cree que el individuo actuó solo y, aunque el motivo aún no está claro, se ha descartado de momento que tenga conexiones con bandas criminales o con grupos terroristas.
Según la televisión pública SVT, el tirador usó una escopeta de caza, pero la Policía sueca no confirmó esas informaciones, ni si tenía licencia de armas o había estado en contacto con los servicios psiquiátricos.
Forest alertó acerca de las informaciones falsas aparecidas en redes sociales según las cuales el agresor actuó por motivos ideológicos y apeló a la ciudadanía en busca de videos o testigos de lo ocurrido.
El tiroteo comenzó hacia las 12:30 hora local del martes en el Campus Risbergska, una escuela que forma parte de un complejo educativo de educación para adultos.
Alumnos y profesores fueron alojados en otras escuelas colindantes durante horas hasta que la policía pudo garantizar la seguridad en el lugar de los hechos.
Aunque SVT y otros medios suecos empezaron a hablar de varios muertos, la Policía no confirmó que había fallecidos hasta pasadas varias horas.
"Tiene que ver con que la escuela cuenta con varios locales grandes. Nos llevó mucho tiempo inspeccionarlos y averiguar si había más heridos", declaró hoy Forest.
De los seis adultos que permanecen ingresados en el hospital universitario de Örebro, cinco fueron operados por heridas graves: todos se encuentran estables, aunque dos permanecen en cuidados intensivos.
Todo el complejo educativo permanecerá cerrado el resto de la semana, aunque las otras escuelas municipales abrirán hoy con normalidad.
Las banderas ondearán a media asta en señal de duelo en el ayuntamiento de Örebro, el Palacio Real de Estocolmo, el Parlamento y la sede del gobierno sueco.
Las autoridades locales han habilitado líneas telefónicas y varios centros para quienes necesiten apoyo psicológico.
Los reyes Carlos XVI Gustavo y Silvia; el primer ministro, Ulf Kristersson; y el ministro de Justicia, Gunnar Strömmer, se desplazarán este miércoles a Örebro, en cuya iglesia principal se celebrará un servicio religioso para homenajear a las víctimas.
Kristersson había calificado anoche lo ocurrido como el peor suceso de ese tipo en la historia de Suecia, un país que en los últimos años ha vivido un aumento considerable de la violencia armada vinculada a conflictos entre bandas criminales.
Con información de Latinus