Villahermosa, Tabasco, 05/02/2025 (Más).- El general Miguel Ángel López Martínez asumió el mando de la 30 Zona Militar, en sustitución de Héctor Francisco Morán González, quien dejó el cargo tras la aparición de narco mantas que lo acusaban de tener vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
La ceremonia de relevo se realizó el 31 de enero en la explanada del 37 Batallón de Infantería, y desde el 1 de febrero, López Martínez tomó oficialmente el control de la jurisdicción militar que abarca Tabasco y algunas regiones de Chiapas. El nuevo comandante rindió protesta ante el general José Francisco Jiménez, titular de la 7ª Región Militar.
Con 40 años de trayectoria en el Ejército Mexicano, López Martínez ha ocupado cargos como titular de las 4ª y 7ª Regiones Militares, jefe administrativo y logístico del Estado Mayor, y responsable de la dependencia 45 en Sonora, además de liderar la segunda brigada especial en Tijuana, Baja California.
El relevo en la 30 Zona Militar se da en un contexto de crecientes denuncias contra Morán González, quien fue señalado en narcomensajes por supuestamente brindar protección al CJNG a cambio de pagos millonarios. En las mantas, los presuntos criminales afirmaban haber entregado hasta 10 millones de pesos a autoridades locales y pedían al gobernador Javier May y a las corporaciones de seguridad “respetar los acuerdos”.
En octubre de 2023, Morán González había negado la presencia de cárteles en Tabasco, asegurando que la violencia en la entidad era provocada por grupos locales que se hacían pasar por organizaciones criminales más grandes. “Son los mismos delincuentes que antes se llamaban La Barredora, luego Cártel del Noreste y ahora CJNG. Ellos se autonombran, pero no son cárteles”, declaró en su momento.
El excomandante de la 30 Zona Militar protagonizó varios desencuentros con medios de comunicación debido a la aparición de narcomantas en el estado. En noviembre de 2024, durante una conferencia del gobernador Javier May, Morán González interrumpió a los reporteros para afirmar que no daría voz a los criminales. “Si ustedes quieren, únanse a los cobardes”, expresó visiblemente molesto.
El 16 de enero, tras la aparición de nuevas narcomantas junto a restos humanos, volvió a arremeter contra la prensa por difundir estos mensajes. “Es su problema, pero las autoridades no pueden legitimar la voz de un delincuente”, dijo.
Días después, el Congreso de Tabasco aprobó reformas al Código Penal del estado, tipificando la colocación de narcomantas como un delito grave, con penas de hasta ocho años de prisión y multas equivalentes a 200 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA).
Con la llegada de Miguel Ángel López Martínez, se espera que la 30 Zona Militar refuerce sus estrategias de seguridad en la entidad y atienda la creciente violencia que ha marcado los últimos meses en Tabasco.
Con información de Massinformación.