Monterrey, Nuevo León, 06/02/25 (Más).- Han pasado 705 días desde que se anunció la construcción de una gigafactory de Tesla en Santa Catarina, Nuevo León. Sin embargo, a pesar de la expectativa generada en el país, la obra sigue en pausa y sin señales claras de reactivación. En contraste, la compañía ha decidido expandir su presencia en el mercado mexicano con la venta anticipada del Model Y, su más reciente vehículo eléctrico.
El CEO de Tesla dio a conocer que el nuevo automóvil ya está disponible para pedidos en México, con un precio inicial de 60 mil dólares (aproximadamente 1.2 millones de pesos). Se espera que las primeras unidades lleguen en marzo de este año, sumándose así a los modelos 3, X y S, que ya se comercializan en el país.
El Modelo Y cuenta con un diseño futurista, conectividad mejorada, autoconducción supervisada, sistema de seguridad reforzado y carga rápida, características que lo posicionan como un fuerte competidor en el segmento de autos eléctricos.
A pesar de la apuesta de Tesla por el mercado mexicano, la construcción de su planta en Nuevo León sigue detenida. En marzo de 2023, Musk anunció junto con el gobernador Samuel García la llegada de la fábrica, con una inversión estimada de 4 mil 500 millones de dólares. No obstante, en 2024 el empresario reveló que el proyecto estaba en pausa, sin dar explicaciones ni notificar oficialmente al gobierno estatal.
Aunque no hay un motivo oficial para la suspensión, medios internacionales han señalado que la decisión pudo deberse a un ajuste en el presupuesto de Tesla, la incertidumbre económica global y la amenaza del expresidente y ahora mandatario electo de EE.UU., Donald Trump, de imponer aranceles a productos exportados desde México y China.
Actualmente, los terrenos destinados a la gigafactory en Santa Catarina, que abarcan más de mil hectáreas, permanecen abandonados, pese a que ya contaban con permisos estatales y federales, y que incluso se habían iniciado obras viales para conectar la planta con la carretera Monterrey-Saltillo y el Anillo Periférico. Estas construcciones fueron suspendidas por el gobierno estatal tras la pausa del proyecto.
Mientras la fábrica de Tesla en México sigue en incertidumbre, Elon Musk ha mantenido una relación ambivalente con el país. En los últimos meses, ha emitido críticas en redes sociales sobre temas de seguridad, migración y narcotráfico, al tiempo que ha reconocido la negociación del gobierno mexicano para frenar la imposición de aranceles de EE.UU.
Además de Tesla, Musk también ha expandido en México otras de sus empresas, como Starlink, su servicio de internet satelital, y X (antes Twitter), que cuenta con alrededor de 18 millones de usuarios en el país.
A pesar del crecimiento de Tesla en el mercado automotriz mexicano, el futuro de la planta en Nuevo León sigue sin definirse, lo que deja en duda si el estado será parte de la producción global de la empresa o si solo será un mercado de consumo para sus vehículos eléctricos.
Con información de Massinformación.