El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, acusó que la entrega de 29 criminales de Estados Unidos se debió a que "existía un riesgo de que algunos de estos objetivos solicitados por el gobierno de Estados Unidos fueran liberados o siguieran atrasándose sus procesos de extradición derivado de acuerdos con algunos jueces que buscaban favorecerlos, como ya se había hecho en otras ocasiones y durante muchos años".
El jueves por la tarde, el gobierno federal anunció que 29 personas habían sido trasladadas a distintos estados de Estados Unidos al ser requeridas por vínculos con el crimen organizado.
Entre los detenidos figuran líderes y operadores de alto nivel tales como:
Con información de Latinus