En Nuevo Laredo, Tamaulipas, una mujer denunció ante medios de comunicación y ante la Fiscalía General de la República (FGR) haber sido víctima de abuso sexual por parte de supuestos elementos del Ejército y la Guardia Nacional (GN).
De acuerdo con su testimonio, el pasado domingo 2 de marzo cuando se dirigía a su trabajo en la zona conocida como Las Carboneras, fue interceptada por tres patrullas de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y una de la GN en la brecha Grúas Mora, también conocida como “la brecha de los polis”.
Los militares y guardias la detuvieron acusándola de ser delincuente, la privaron de su libertad y la llevaron al río Bravo, en donde la despojaron de su ropa, la interrogaron con violencia y la sometieron a múltiples vejaciones.
La víctima señaló que las agresiones en su contra estaban lideradas por una persona que ella identificó como el comandante, al que describió como un hombre moreno, de baja estatura, robusto, con barba y lentes.
Posteriormente, al rededor de 20 militares la obligaron a realizar actos sexuales bajo la amenaza de que sería asesinada si no lo hacía, narró la mujer, cuya identidad está reservada por motivos de seguridad.
La mujer fue abandonada en el lugar y también denunció que le quitaron su celular así como los mil pesos que llevaba consigo al momento de los hechos.
“Quiero poner una demanda y que no le pase esto a ninguna otra mujer”, señaló la víctima a los medios antes de presentar su caso ante el ministerio público federal de la subdelegación de la FGR en Nuevo Laredo.
La dependencia inició una carpeta de investigación con el número FED/TAM/NVO.LAR/0000518/2025 por los delitos de lesiones, abuso sexual y robo contra de los supuestos elementos que resulten responsables.
La ciudad fronteriza ha sido escenario de múltiples casos de ejecuciones extrajudiciales, abusos de autoridad y asesinatos cometidos por parte de agentes de fuerzas federales de seguridad.
Hace un par de semanas, cuatro militares fueron sentenciados por el asesinato de cinco jóvenes, ocurrido el 26 de febrero de 2023, cuando se dirigían a sus domicilios. Las víctimas fueron perseguidas y acribilladas sin motivo.
Con información de El Mañana de Reynosa.
Con información de: Animal Político.