CIUDAD DE MÉXICO (apro).-El secretario de Estado, Marco Rubio anunció una nueva política de restricción de visas que se aplicará a los funcionarios de gobiernos extranjeros, incluidos los funcionarios de inmigración y aduanas, autoridades aeroportuarias y portuarias y otras personas que se considere responsables de “facilitar deliberadamente la inmigración ilegal".
La medida se da un día después de que el presidente Donald Trump pronunció un discurso en el Congreso y reiteró su política antiinmigratoria.
“Proteger las fronteras de nuestra nación es de vital importancia para que Estados Unidos sea un país más seguro, más fuerte y más próspero. Los países a lo largo de las rutas migratorias deben hacer su parte para prevenir y disuadir el tránsito de extranjeros que buscan ingresar ilegalmente en Estados Unidos”, refiere la comunicación del Departamento de Estado.
De acuerdo con Rubio, las restricciones se mantendrán hasta que los funcionarios extranjeros asuman la responsabilidad de garantizar políticas migratorias eficaces en sus países.
Esta nueva restricción complementará otra ya existente, conocida como C3, enfocada en actores del sector privado que fomenten la migración irregular.
Hasta el momento la Cancillería mexicana no ha emitido ningún pronunciamiento al respecto.
Se prevé que este jueves 6 de marzo, la presidenta Claudia Sheinbaum mantendrá una llamada con Trump para conversar sobre el tema de los aranceles.
El martes, Trump impuso un arancel de 25% a las importaciones de México y Canadá, gravando los productos energéticos canadienses como el petróleo y la electricidad con una tasa de solo 10%.
El presidente también duplicó el arancel de 10% que había impuesto a China, llevándolo a 20%.
Con información de proceso.com.mx