Ejecutómetro: 0
Dólar: 19.47 MXN
10°

Navidad

Quisiera inspirarme para escribir bellas palabras que lleguen a tu corazón y se sienta ese espíritu de Navidad tan esperado cada año.

Sin embargo, se me está haciendo difícil porque éste ha sido un año diferente y también  una Navidad diferente

No cabe duda que la vida cambia, que cada etapa es distinta y que debemos adaptarnos a ellas,  ciertamente no es fácil, pero es parte de la vida el ir madurando, el ir comprendiendo y adaptándose poco a poco  tanto a la madurez física y mental, como al crecimiento y eventualmente desprendimiento de los hijos.

Cuando queremos aferrarnos a que nada cambie, a que todo permanezca igual, es cuando sufrimos y  nos cuesta trabajo aceptar y adaptarnos a los cambios naturales de vida.

Esta Navidad ha sido tan distinta, lejos de mi mamá , de mis hermanos, sobrinos y amigos, lejos de mi casa que me da ese calor de hogar que me hace sentir segura, lejos de mi país y tradiciones, pero junto a mis hijos, mi pequeña familia que amo tanto.

Hoy en la mañana fuimos a misa (eso no puede cambiar) y le di gracias a Dios, gracias por la vida que me ha tocado tener, por las experiencias vividas y por todo lo que de eso he aprendido, gracias por cada batalla perdida y por cada cicatriz que ha marcado mi cuerpo y mi alma, gracias por tantas personas a las que amo y me aman pero también por quienes me critican y no me entienden,  gracias por quienes hoy están conmigo, pero sobre todo por mis amores a quienes ya no puedo abrazar.

Pero hoy especialmente doy gracias a Dios por estar con las personas que hacen que mi existencia tenga un nuevo sentido cada día, que me inspiran a soñar y a amar la vida, que me dan fuerza y energía para querer seguir viviendo intensamente, que son mi luna y mi sol... mis adorados hijos, en los que estoy dejando un pedazo grande de mi misma, en los que veo el reflejo de mis propios ojos para poder sentir a través de los suyos y así sentirme más viva aún.

Sin lugar a dudas soy una persona muy bendecida, Dios ha sido mi guía y mi refugio y  nunca me ha abandonado, ¿que si confío y creo en El a pesar de las adversidades.? Claro que si, hoy más que nunca.

Por eso te deseo que esta Navidad la luz de la Esperanza ilumine tu corazón, que Jesús llene tu casa de amor y sea El quien camine delante de ti como la estrella de  Belén mostrándote el camino del amor y de la paz, para que seas tu mensajero de Esperanza para los tuyos y para el mundo.
Feliz Navidad

Velia Rojas Zambrano

Notas recientes