El Papa Francisco ha abandonado el Policlínico Gemelli de Roma, para regresar a su residencia de la Casa Santa Marta en el Vaticano, tras recibir el alta médica después de permanecer 38 días ingresado por una infección respiratoria.
El Pontífice salió del hospital poco después de asomarse a la ventana del décimo piso del policlínico en el que había pasado las últimas semanas. Esta fue su primera aparición pública en persona, donde aprovechó para saludar y bendecir a los fieles.
En las puertas del hospital había decenas de personas y medios de comunicación.
El desplazamiento hasta el Vaticano se realizó a bordo del pequeño vehículo que usan habitualmente. Al llegar, también había numerosos curiosos para ver su reaparición en las pantallas colocadas en la plaza de San Pedro.
El Papa regresó al Vaticano para comenzar al menos dos meses de descanso, rehabilitación y convalecencia, durante los cuales los médicos han dicho que debería abstenerse de reunirse en grandes grupos o esforzarse demasiado.
Sin embargo, el médico personal de Francisco, el doctor Luigi Carbone, dijo en una conferencia de prensa organizada apresuradamente el sábado por la noche, que el Papa eventualmente debería poder reanudar todas sus actividades normales siempre y cuando mantenga el progreso lento y constante que ha registrado hasta la fecha.
Su regreso a casa, después de la hospitalización más larga de su papado de 12 años y la segunda más larga en la historia papal, llevó un alivio tangible al Vaticano y a los fieles católicos, que habían presentado evidente nerviosismo los 38 días de altibajos médicos y que había sembrado dudas sobre si Francisco saldría adelante.
“Hoy siento una gran alegría”, dijo la doctora Rossella Russomando, una médica de Salerno que estaba en el Gemelli el domingo. “Es la demostración de que todas nuestras oraciones y todos los rosarios del mundo trajeron gracia”.
No se han hecho arreglos especiales en la Domus Santa Marta, el hotel del Vaticano junto a la basílica de San Pedro donde Francisco vive en una suite de dos habitaciones del segundo piso. Francisco tendrá acceso a oxígeno suplementario y atención médica las 24 horas según sea necesario, aunque Carbone dijo que esperaba que Francisco progresivamente necesitara cada vez menos asistencia para respirar a medida que sus pulmones se recuperen.
Aunque la infección por neumonía ha sido tratada con éxito, Francisco continuará tomando medicación oral durante bastante tiempo para tratar la infección fúngica en sus pulmones y continuará su fisioterapia respiratoria y física.
“Durante tres o cuatro días ha estado preguntando cuándo puede ir a casa, así que está muy feliz”, dijo Carbone.
La salud de Francisco
Al Papa Francisco se le extirpó parte de un pulmón cuando era joven, debido a una epidemia de gripe que sufrieron muchos presentes en un seminario.
El 14 de febrero fue ingresado en el hospital Gemelli debido a un episodio de bronquitis.
En un primer momento, los médicos diagnosticaron una infección compleja del tracto respiratorio de origen bacteriano, viral y fúngico y poco después, neumonía en ambos pulmones.
Los contratiempos comenzaron el 28 de febrero, cuando Francisco experimentó un ataque agudo de tos e inhaló vómito. Unos días después sufrió dos crisis respiratorias más, lo cual requirió que los médicos aspiraran manualmente cantidades de moco en sus pulmones. A partir de ese momento durmió con una máscara de ventilación.
Con información de Informador.mx