La proliferación de productores independientes de fentanilo en México está fragmentando el tráfico de drogas y representa un nuevo desafío para la seguridad binacional, advirtió Tulsi Gabbard, directora de Inteligencia Nacional de Estados Unidos (DNI, por sus siglas en inglés), durante la audiencia anual del Comité Selecto de Inteligencia del Senado sobre amenazas globales.
Gabbard explicó que la disponibilidad de precursores químicos y la facilidad para fabricar fentanilo ilícito han permitido la aparición de actores independientes que han intensificado la producción y el contrabando de esta droga desde territorio mexicano.
"Los cárteles siguen beneficiándose del tráfico de personas y han facilitado la llegada de más de dos millones de migrantes irregulares a la frontera suroeste de Estados Unidos en 2024", agregó.
La directora del DNI también subrayó que los grupos criminales continúan alimentando la inestabilidad y el desgobierno en el hemisferio occidental, diversificando sus operaciones ilícitas a través de la extorsión, el contrabando de armas y personas, secuestros con fines de rescate y la explotación laboral y sexual.
"Estos grupos operan en la clandestinidad, aprovechando la falta de Estado de derecho en ciertas regiones y recurriendo a la intimidación y la coacción para mantener el control sobre sus víctimas", advirtió.
El informe presentado ante el Senado también destaca el impacto de las medidas de refuerzo en la frontera sur de Estados Unidos implementadas por la administración Trump, señalando que las aprehensiones en enero de 2025 cayeron 85% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Durante la audiencia también se abordaron amenazas provenientes de actores estatales y no estatales, destacándose el papel de grupos extremistas como ISIS y Al Qaeda, que buscan influir y radicalizar a individuos en Occidente. Gabbard mencionó el caso del atacante del día de Año Nuevo en Nueva Orleans, quien, aunque no tenía contacto directo con ISIS, se habría radicalizado mediante propaganda de ese grupo.
En el ámbito cibernético, la directora del DNI alertó sobre la acción de actores no estatales que utilizan tácticas como ransomware y ataques de denegación de servicio para afectar infraestructuras críticas y extraer información sensible con fines de extorsión o espionaje. "Algunos de estos actores operan como proxies de potencias extranjeras que buscan desafiar la seguridad y los intereses de Estados Unidos", explicó.
Finalmente, la audiencia abordó la creciente influencia de China, Rusia, Irán y Corea del Norte en el escenario global. El informe señala que China es el principal desafíoestratégico de Washington, con una estrategia enfocada en fortalecer su posición económica, tecnológica y militar. Beijing también ha reforzado sus capacidades cibernéticas, según el informe, con operaciones sofisticadas dirigidas al robo de información del gobierno y el sector privado estadounidense.
Con información de: LatinUs.